¿Por qué me gusta tanto hablar sobre la noche? Será porque es el momento perfecto para volar, soñar, pensar y sentir....Es que:
Ver como poco a poco las calles se van desocupando dejando tan solo que el viento deambule por estas, mientras la perfecta luna y sus guardaespaldas y amigas estrellas iluminen con su brillo el asfalto y el polvo que se levanta con cada onda aireada...Como poco a poco apagan en cada hogar las luces y el silencio se hace dueño y señor de cada parte de este lugar....
Que la única bulla que exista sea la de mis pensamientos en mi cabeza, y en la de los demás que aprovechan la paz y tranquilidad que se puede sentir en estas horas del día....Que el maravilloso mundo de los sueños abra sus puertas a cada uno de los individuos que deseen despegarse de la realidad y sonreír simplemente una vez mas, donde puedan descansar del estrés y las injusticias que pueda tener este mundo, de los retos que han alcanzado y desean seguir buscando.
Este momento en que cada uno de nosotros puede sentarse y sentir con mas fortaleza su respiración, el palpitar de su corazón y cada idea que surge en nuestro mar de pensamientos.
Invocar nuestra voz interna y platicar con el aroma peculiar de cada pueblo o ciudad....Sonará loco pero que mas da!
Esa inmensa blanca que nos vigila noche tras noche, que nos escucha y cuida, que nos ama tanto que esta justo enfrente de nosotros esperando que la alcancemos y sigamos su rumbo. Que sintamos su presencia y su propio "calor".
Descansar del ruido que generan nuestras nuevas tecnologías, y las antiguas también!! Descansar de gritos y discusiones, de cada uno de esos ruidos insoportables que genera el sitio que dramáticamente se ahoga en el cantar de la brisa y del sentir de la que ahora nos cuida...la madre naturaleza.
La noche, el mejor momento para compartir con alguien especial, y hasta con nosotros mismos; el mejor momento para ser libres y para ser lo que no fuimos en el día.